Las emociones son reacciones de nuestro organismo, que surgen espontáneamente en torno a la interpretación lingüística que hacemos de lo que nos acontece. Si a esa situación la percibimos como algo que no deseamos, que nos resulta desagradable y en general, que atenta contra algún aspecto de nuestra integridad moral, como por ejemplo algo que percibimos como injusto, nuestro cuerpo tiende a tensarse, sube el ritmo cardíaco, segrega mayor cantidad de adrenalina y noradrenalina y, como es en la naturaleza, esto significa que se prepara para dar pelea. Esto es el enojo o ira.
A veces podemos creer que del enojo no se vuelve tan fácilmente, sin embargo, aún cuando representa un gran desafío, te dejamos algunas nuevas actitudes que puedes explorar cuando comienzas a sentirlo, o cuando ya estás habitando el enojo:
Esta publicación tiene fines divulgativos, no reemplaza la importante función que tiene la medicina. Consulta siempre con especialistas ante cualquier cualquier respuesta física y/o mental que te genere dudas.
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